viernes, 3 de septiembre de 2021

LA DECISIÓN DE SER PADRES

Ser padres es una decisión importante en la vida de las personas. 

La motivación para ser padres puede deberse a culminar un proceso de creación familiar, desear cuidar de alguien con la motivación de dar vida y educar para su felicidad, así como el deseo humano de la reproducción como algo biológico y más instintivo y primitivo que nos conecta con nuestra humanidad.


Es importante a la hora de ser padres, plantearse algunas preguntas:

¿Me siento preparado para tener este rol? ¿Qué me falta? ¿Qué si que tengo? ¿Puedo ocuparme de aquello que me falta en este momento, cómo será ser padre sin esto que no tengo, es viable y posible?

¿Cómo imagino mi vida siendo padre/madre? ¿En qué va a cambiar? ¿Cómo voy a hacer frente a estos cambios? ¿Cómo va a cambiar mi vida en pareja, (si tengo pareja) y mi vida social si estoy sól@?

¿Qué necesidades imagino que va a tener mi hijo durante el embarazo, los primeros meses y los primeros años de vida? ¿Cómo voy a ocuparme de estas necesidades? ¿Con qué recursos sociales/familiares/institucionales voy a poder contar?

¿Cómo fue mi propia infancia? ¿He sido un hij@ deseado y querid@? ¿Cómo puede afectar mi propia infancia, y la de mi pareja (en caso de tenerla), en la forma de ser padres?


Contestar estas sencillas cuestiones, si puede ser acompañados de alguien de confianza o a solas o con un profesional, pueden ser reflexiones interesantes a la hora de decidir ser padres.

En muchas ocasiones, esta decisión, no se reflexiona y se adopta de manera impulsiva,  o surge de forma accidental, casi inconsciente. Es importante prevenir la accidentalidad, la impulsividad y los malos motivos en la decisión. Por ejemplo, si no disponemos de estabilidad emocional, ni recursos logísticos, ni apoyo, hemos de pensar que un hijo aún nos va a dificultar más conseguirlos, puesto que erróneamente, muchas personas tienden a pensar que un hijo les dará aquello que les falta (seguridad, confianza, recursos, apoyo), pero es más bien al revés, somos nosotros los que hemos de darnos sostén y darle sostén al bebé y somos nosotros quienes tenemos que tener la capacidad de educar, guiar, comprender, apoyar y gestionar las emociones de nuestro hij@.

Así que.. ¿Porqué no empezar por sentirnos suficientemente preparados, dando los pasos oportunos para conseguirlo? Es un buen paso, hacer por estar maduros y listos, para esta misión!! 



No hay comentarios:

Publicar un comentario

TRASTORNOS ALIMENTARIOS EN LA FAMILIA

Muchas familias tienen problemas con la alimentación, algunas veces, pueden ser las madres obsesionadas por cuerpos perfectos haciendo dieta...